Un individuo de 28 años de nacionalidad marroquí fue arrestado el pasado sábado tras intentar sustraer productos por valor de aproximadamente 500 euros en un supermercado de Rubí, Barcelona. El intento de robo fue frustrado gracias a la intervención de un agente de los Mossos d'Esquadra que se encontraba fuera de servicio en el establecimiento.

Los hechos ocurrieron alrededor de las tres de la tarde en el Mercadona ubicado en la calle de Marconi. El sospechoso intentó salir del supermercado sin abonar varios artículos en caja. Ante la negativa del individuo a dejar los productos y su actitud violenta, que incluyó empujar a uno de los cajeros, los empleados del supermercado iniciaron una persecución.

Un agente de los Mossos d'Esquadra, que se encontraba en el lugar, se unió a la persecución al ver lo que sucedía. El ladrón rompió una puerta de emergencia para intentar escapar, pero fue alcanzado por uno de los empleados fuera del establecimiento. A pesar de que el agente se identificó, el sospechoso intentó huir nuevamente. Sin embargo, gracias a la colaboración entre los trabajadores y el policía, lograron inmovilizarlo y detenerlo por robo con violencia.

El detenido continuó resistiéndose y tratando de escapar, lo que requirió la intervención del vigilante de seguridad para que el agente pudiera esposarlo y contactar a sus compañeros. Una patrulla uniformada llegó al supermercado y se hizo cargo del detenido, quien llevaba escondidos varios de los productos robados, valorados en unos 500 euros.