La atención a los 520 menores extranjeros no acompañados (menas) que actualmente residen en Ceuta ha llevado a la ciudad a un estado crítico. Aunque los centros tienen capacidad para 132 menas, la sobreocupación es del 500 %. Según el Gobierno ceutí, cada mena supone un gasto diario de 77 euros en asistencia, manutención y alojamiento, lo que equivale a 2.310 euros al mes y 28.105 euros al año.
El Ejecutivo local ha solicitado al Gobierno de Pedro Sánchez 11 millones de euros para cubrir los gastos previstos en 2024 y calcula que en 2025 necesitará 14,6 millones más, acumulando 25,63 millones en sólo dos años. A esto se suman los gastos asociados a la atención de inmigrantes mayores de edad, que alcanzan los 90 euros diarios por cada uno.
En los primeros nueve meses de este año, 761 menas cruzaron a Ceuta a nado desde Marruecos, una cifra muy superior a los 159 del mismo periodo en 2023. El portavoz del Gobierno ceutí, Alejandro Ramírez, ha insistido en que el Estado debe asumir el coste de la crisis, calificando la situación financiera de la ciudad como «prácticamente insostenible».
El Ejecutivo local y el Gobierno central están pendientes de una reunión para abordar esta emergencia. Mientras tanto, Ceuta sigue denunciando la falta de apoyo estatal para gestionar el desbordamiento de sus centros de acogida y reclama una solución urgente a la saturación y los gastos desmedidos.
