El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha confirmado la condena de dos años y diez meses de prisión para un marroquí en situación irregular, responsable del incendio de una nave industrial en Almería. El individuo, identificado como D. Said L., causó daños valorados en casi medio millón de euros.
Los hechos tuvieron lugar el 20 de octubre de 2022, cuando D. Said L., de 29 años y con antecedentes penales, se dirigió a una nave industrial ubicada en la calle Escaño número 18, en el Polígono Sector 20 de Almería. Utilizando un mechero, provocó un incendio en el almacén con la intención explícita de destruirlo, propiedad de Propco Epsilon S. L. El fuego se propagó rápidamente debido a los materiales inflamables presentes, lo que resultó en la destrucción casi total de la instalación, con daños estimados en más de 472.000 euros.
Posteriormente, el condenado se trasladó a la calle Cordel de la Campita, en el mismo polígono, donde incendió un contenedor y una zona de pastos con el mismo ánimo destructivo. Los daños causados en esta ocasión ascendieron a 1.485 euros.
Continuando su recorrido, D. Said L. intentó provocar otro incendio en la avenida Torre-cárdenas, pero fue descubierto por un vecino que alertó a la Policía Local. Al llegar los agentes, el individuo intentó huir, aunque fue detenido poco después en un parque cercano tras oponerse «fuertemente» a su detención. Entre sus pertenencias se encontró un mechero amarillo. Al día siguiente, ingresó en prisión provisional.
El TSJA ha determinado que D. Said L. cumplirá dos terceras partes de su condena en España, siendo el resto sustituido por su expulsión del país. Además, se le ha impuesto una prohibición de regreso a España por seis años y una indemnización de 473.935 euros a las entidades afectadas.
La sentencia del TSJA ratifica la decisión de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Almería, subrayando que el condenado actuó con plena conciencia y voluntad. La prueba indiciaria se fundamenta en el testimonio de un testigo que vio a D. Said L. saliendo de una zona de matorrales quemados, cerca de los otros incendios. Este ciudadano, que paseaba a su perro, fue amenazado por el inculpado con las palabras «no me mires a la cara», pero mantuvo la calma y siguió las indicaciones de la Policía para seguir al sospechoso hasta su detención.
El alto tribunal andaluz ha desestimado el recurso de apelación presentado por D. Said L., confirmando así la sentencia de la Audiencia de Almería que lo condenó por un delito continuado de daños por incendio.
