El Consell de Mallorca y el Institut Mallorquí d’Afers Socials trabajan para abrir un nuevo centro destinado a menores inmigrantes no acompañados (MENAS). Ante el aumento de llegadas, ambas instituciones buscan aliviar la presión sobre la red actual de acogida, que está al límite de su capacidad.
El Consell ha pedido a la Delegación del Gobierno que agilice la cesión de un espacio que podría utilizarse para este fin. En un comunicado emitido este jueves, insistieron en la urgencia de avanzar en el proceso, subrayando que la situación requiere soluciones inmediatas.
El lugar solicitado es el antiguo polvorín del Puig de Santa Magdalena, en Inca, según adelantó IB3. Estas instalaciones militares están abandonadas desde hace años y ocupan una parcela de seis hectáreas y cuentan con dos naves de 500 metros cuadrados cada una.
El polvorín fue puesto a la venta en 2022 por el Ministerio de Defensa y está considerado como un espacio adecuado para adaptar a las necesidades de los menas, según fuentes del Consell. Su recuperación permitiría mejorar la atención a estos jóvenes en situación de vulnerabilidad.
