La Policía Nacional ha detenido y expulsado del país a un ciudadano marroquí «altamente radicalizado» tras protagonizar varios incidentes en Navarra, que, según las autoridades, «habrían podido derivar en situaciones de grave peligro».
Uno de los episodios más graves ocurrió en julio del año pasado en una iglesia de Pamplona, donde este individuo amenazó a un párroco con frases de carácter yihadista. Durante el altercado, llegó a gritar: «Me gustaría tener un arma, pero quien dispara es Alá». La rápida intervención de la Policía Nacional evitó que el incidente fuera a mayores y culminó en su detención.
Durante la investigación posterior, los agentes descubrieron que el detenido difundía material enalteciendo a «mártires» y promoviendo llamamientos a la yihad. También compartía mensajes que criticaban duramente valores como la libertad, el liberalismo, el secularismo y el ateísmo. Además, el individuo alentaba a seguir las enseñanzas de clérigos radicales, muchos de los cuales están encarcelados, alegando que «son los que explican el verdadero Islam».
El marroquí expulsado también expresó su desacuerdo con las mezquitas abiertas al público, a las que calificó de «excesivamente laxas» y de no enseñar el Islam auténtico, según la investigación policial.
Ante la gravedad de estos hechos y su potencial amenaza para la seguridad nacional, las autoridades tramitaron un expediente de expulsión preferente. Finalmente, esta medida se ejecutó de manera urgente, garantizando su salida del territorio español.