Agentes de la Policía Nacional lograron la detención de un individuo marroquí en el Aeropuerto de Palma, quien había sido condenado a cinco años y medio de prisión por un intento de homicidio ocurrido en 2018 en Manacor. El delincuente, que había escapado a Bélgica tras su condena en 2021, fue aprehendido apenas desembarcó en Son Sant Joan. Tras ser llevado ante el juez de guardia, se ordenó su ingreso inmediato en prisión.

Video del traslado del individuo / Policía Nacional

Los hechos que llevaron a su condena tuvieron lugar en un lavadero de coches en Manacor, donde el condenado, junto a su hermano, mantuvo una violenta discusión con un compañero de trabajo. En el transcurso de la disputa, ambos inmovilizaron a la víctima, y el ahora detenido aprovechó la situación para intentar degollarla con un cúter, causándole una herida de 15 centímetros en el cuello. Aunque las lesiones fueron graves, la víctima logró sobrevivir.

En 2021, la Sección Primera de la Audiencia de Palma juzgó al individuo y a su hermano por el delito de intento de homicidio. Ambos negaron su participación, pero el autor material fue sentenciado a cinco años y medio de prisión, mientras que su hermano recibió una condena de tres años y medio. Además, ambos fueron obligados a indemnizar a la víctima con 7.000 euros. Sin embargo, el principal acusado huyó poco después, y su paradero permaneció desconocido hasta su reciente captura.

La Policía Nacional de Manacor, en colaboración con el Grupo de Fugitivos de la Policía Judicial y con la ayuda de investigadores de la Policía de los Países Bajos, donde inicialmente se había refugiado el prófugo, llevó a cabo una exhaustiva investigación. La información sobre el fugitivo también fue compartida con la Comisaría del Aeropuerto de Palma.

Al descubrirse que el prófugo planeaba regresar a Mallorca, se estableció un dispositivo especial en el aeropuerto para asegurar su detención. No se le permitió salir del aeropuerto, y fue detenido inmediatamente después de bajar del avión. Posteriormente, fue trasladado a la Comisaría de la Policía Nacional de Son Sant Joan para completar los trámites necesarios. El juez de guardia, al conocer la reclamación judicial emitida por la Audiencia de Palma, ordenó su ingreso directo en prisión.

Este individuo se distinguía por su comportamiento extremadamente violento, con un historial de 18 detenciones por delitos que incluyen atraco, lesiones y robos en domicilios, en los que no dudó en usar la violencia contra las personas.