La Policía Nacional investiga el asesinato de una mujer marroquí de 38 años ocurrido en Almería. El pasado lunes, un hombre español de 28 años se presentó en comisaría confesando el crimen tras inicialmente afirmar que había sido testigo de un homicidio. Los agentes localizaron el cuerpo de la víctima en un descampado, gravemente dañado debido a un intento de incineración. El acusado ha ingresado en prisión tras pasar a disposición judicial.
El asesino es residente en Alemania y estaba en Almería visitando a su familia durante las vacaciones de Navidad. Aunque está casado y espera un hijo, conoció a la víctima, una mujer con problemas de drogadicción, en días previos al suceso. Según su testimonio, discutieron dentro de su coche, donde la estranguló con una cadena, y después trasladó el cuerpo a un descampado en el barrio de Retamar, donde después trató de deshacerse de él prendiéndole fuego.
El cadáver fue hallado por los agentes en medio de un incendio activo, que además afectaba a un árbol cercano. La autopsia confirmó la muerte por estrangulamiento, mientras que la identidad de la víctima, quien deja una hija de 20 años, está pendiente de confirmación definitiva mediante pruebas de ADN. La familia de la fallecida describió su situación personal como complicada y marcada por problemas con las drogas.