La Guardia Civil recuperó este sábado en Ceuta el cuerpo sin vida de un joven inmigrante magrebí que flotaba en el mar equipado con aletas y un traje de neopreno. Este hallazgo supone el primero de este tipo en 2025, tras un 2024 en el que más de veinte inmigrantes fallecieron en situaciones similares.
El aviso llegó a la Benemérita alrededor de las 13:00 horas, cuando se avistó un cuerpo flotando cerca de la zona de Santa Catalina. Inmediatamente, agentes del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) y del Servicio Marítimo acudieron al lugar para proceder a la recuperación del cadáver.
Según informó la Comandancia de la Guardia Civil, se trata de un joven de unos 20 años y origen magrebí. El estado de conservación del cuerpo sugiere que la muerte se produjo recientemente. El cadáver ha sido trasladado al Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Ceuta para practicarle la autopsia que permita esclarecer las causas del fallecimiento.
En diciembre se recuperaron otros dos cuerpos el mismo día, también equipados con trajes de neopreno y aletas. Estos sucesos evidencian los peligros mortales a los que se enfrentan los inmigrantes en su intento de alcanzar las costas españolas.
La asociación Pro-Derechos Humanos de Andalucía contabilizó un total de 21 cuerpos recuperados en las aguas de Ceuta durante 2024. Agosto fue el mes más trágico, con cinco fallecidos, coincidiendo con un aumento significativo en los flujos migratorios.
De acuerdo con los últimos datos del Ministerio del Interior, las entradas ilegales por vía terrestre y marítima en Ceuta aumentaron un 137% en 2024 respecto a 2023, alcanzando un total de 2.559 inmigrantes que lograron cruzar. Estos números subrayan la magnitud de una crisis humanitaria que continúa cobrándose vidas.