Una tranquila ciudad del estado alemán de Renania del Norte-Westfalia, Essen, ha sido escenario de una serie de eventos violentos que ha dejado a la comunidad en estado de shock. Un inmigrante de origen sirio, de 41 años, causó el caos el pasado sábado tras provocar incendios en dos edificios residenciales y embestir con un camión tiendas locales de alimentación. En total, 31 personas resultaron heridas, incluidas varias en estado crítico, entre ellas dos niños menores de cinco años que se debaten entre la vida y la muerte.
Desenlace dramático: Rescate heroico y detención violenta
Los hechos ocurrieron la tarde del sábado en el distrito de Altenessen. A las 17:10, numerosas llamadas de emergencia inundaron las líneas de bomberos y policía, reportando un incendio en Pielstickerstraße. Momentos después, un segundo incendio se desató en un edificio de apartamentos en Zollvereinstrasse. Los equipos de bomberos actuaron con rapidez para controlar las llamas y rescatar a los residentes atrapados, quienes, ante la desesperación, se asomaban por las ventanas clamando ayuda mientras el humo envolvía sus hogares.
Varios vecinos improvisaron escaleras para facilitar el rescate de los atrapados, incluidos varios niños gravemente heridos. El cuerpo de bomberos instaló colchones de salto y desplegó escaleras giratorias para evacuar a los residentes que no lograron huir por las rutas de escape, bloqueadas por el fuego. Aunque los incendios se extinguieron en la madrugada del domingo, los efectos del siniestro dejaron múltiples víctimas por inhalación de humo, algunas en estado grave.
Violencia desatada: Atropellos y caos en tiendas locales
Minutos después de los incendios, un camión de reparto embistió dos tiendas en Katernberger Strasse y Meybuschhof, causando daños materiales considerables. Afortunadamente, en esta ocasión no se reportaron heridos adicionales. Las investigaciones preliminares indicaron que el conductor de la furgoneta era el mismo sospechoso de los incendios, quien fue detenido poco después por la policía.
El hombre ha sido identificado como un residente de Essen de nacionalidad siria, portaba un cuchillo y un machete de grandes dimensiones en el momento de su arresto. Según imágenes difundidas en redes sociales, el sospechoso fue retenido violentamente por un grupo de hombres que lo golpearon con palos en un patio trasero antes de la llegada de la policía. Los agentes, con las armas en mano, le ordenaron que arrojara sus armas y se tumbara en el suelo.
Investigación en curso: Motivos desconocidos
La Policía criminal de Alemania ha asumido la dirección de la investigación, buscando esclarecer los nexos entre los diferentes crímenes cometidos por el detenido. Según fuentes policiales citadas por la cadena WDR, no existen indicios que relacionen los hechos con el crimen organizado, aunque el inmigrante ya era conocido por las autoridades por incidentes previos.
El portavoz del cuerpo de bomberos describió la situación como "extraordinariamente dramática", destacando la respuesta rápida tanto de los servicios de emergencia como de los vecinos, quienes desempeñaron un papel crucial en la evacuación de los heridos. Las autoridades continúan trabajando para esclarecer los hechos y garantizar que la justicia prevalezca en este sombrío episodio.
