El pasado 12 de marzo de 2025, la unidad móvil de la policía de Turín, en colaboración con la brigada de policía judicial de la fiscalía local, llevó a cabo la detención de cuatro individuos marroquíes en la ciudad. Dos de ellos, un matrimonio, fueron arrestados bajo sospecha de haber introducido ilegalmente a una recién nacida en Italia desde Marruecos. La bebé fue transportada en una bolsa de plástico durante un largo viaje en barco, poniendo en riesgo su vida con el objetivo de venderla.
En el mismo operativo, se arrestó a otros dos hombres, también marroquíes, acusados de favorecimiento personal. Estos individuos habrían ayudado a mantener a la menor en el país de manera ilegal, intentando así eludir las investigaciones. La operación fue coordinada por las fiscales Antonella Barbera y Chiara Maina de la fiscalía de Turín.
El peligroso viaje desde Tánger a Italia
Las investigaciones comenzaron tras recibir una denuncia en la fiscalía de Turín, indicando que una familia marroquí residente en la ciudad había acogido a una bebé ajena a su núcleo familiar, con la intención de entregarla a terceros. Las pesquisas confirmaron que la bebé había llegado a Italia en octubre del año anterior en un barco procedente de Tánger, acompañada por la mujer arrestada. La menor, nacida presumiblemente en agosto de 2024, fue transportada sin figurar en la lista de pasajeros, en una bolsa de la compra. El prolongado viaje afectó negativamente su salud, por lo que, al llegar a Turín, fue trasladada al hospital Regina Margherita para evaluar su estado.
Búsqueda de la madre biológica y posibles compradores
Actualmente, se realizan esfuerzos para localizar a la madre biológica de la bebé, quien supuestamente entregó a su hija a la mujer arrestada para su traslado desde Marruecos a Italia y su posterior venta. Tras su llegada a Italia, la pareja arrestada contactó a los dos connacionales para que cuidaran de la bebé mientras buscaban una solución definitiva. Según las investigaciones, los sospechosos buscaban a alguien dispuesto a hacerse cargo de la niña a cambio de dinero, o bien, en caso de ser descubiertos, trasladarla al extranjero antes de ser localizados, para evitar ser capturados y asegurar que la bebé no fuera encontrada. Hasta el momento, no se ha confirmado la existencia de posibles compradores.
Operativo policial y arrestos
Después de varias semanas de investigación, el 12 de marzo, los agentes identificaron la vivienda donde la pareja mantenía temporalmente a la menor. Al acceder a la casa, encontraron a la bebé en buen estado de salud, aunque fue trasladada de inmediato al hospital Regina Margherita para recibir atención médica y ser asignada a una familia de acogida. Simultáneamente, se procedió a la detención de los cuatro individuos implicados en el tráfico de la bebé.