El mes pasado publicamos que Marruecos estaba avanzando para captar fábricas de coches españolas. Carlos Tavares, director de Stellantis, destacó recientemente la ventaja competitiva de las fábricas marroquíes. Con costes de producción mucho más bajos que en Europa, Marruecos se ha convertido en un destino prioritario para grandes marcas como Renault y Stellantis, que ya han reforzado su presencia allí con importantes inversiones.
Energía barata y salarios bajos impulsan su competitividad
Los bajos costes en Marruecos tienen dos pilares clave: energías renovables que abaratan la electricidad y salarios que oscilan entre 500 y 600 euros para los operarios. Esto convierte la fabricación en territorio alauita en una opción mucho más rentable para las compañías, dejando a las plantas europeas en desventaja.
Villaverde pierde un modelo clave
La planta de Stellantis en Villaverde, Madrid, dejará de fabricar el Citroën C4 y C4 X en 2027, modelos que actualmente produce en exclusiva. Esta decisión, adelantada por medios franceses y confirmada en España, supone un golpe para una instalación que había ganado competitividad en los últimos años. Por ahora, Villaverde seguirá fabricando el restyling del C4 presentado en el Salón de París, pero su futuro depende de la adjudicación de nuevos modelos.
Marruecos, foco de grandes inversiones
La planta de Stellantis en Kenitra, Marruecos, se prepara para duplicar su capacidad de producción. Con una inversión de 300 millones de euros, esta instalación producirá el nuevo Citroën C4 sobre la plataforma Smart, junto con otros modelos del grupo como el Peugeot 208 o los microcoches Citroën Ami y Opel Rocks. El Gobierno marroquí también amplió las instalaciones del puerto Tanger Med, clave para la exportación, con el objetivo de fabricar un millón de coches al año en 2027.
España sigue siendo relevante, pero con retos
Villaverde produjo más de 105.000 unidades del Citroën C4 en 2022, aunque este año espera cerrar con entre 80.000 y 90.000. España, segundo mayor productor de coches en Europa, enfrenta desafíos por la incertidumbre en la transición hacia la electrificación, un aspecto que influye en las decisiones de asignación de modelos entre plantas.
Marruecos, un competidor cada vez más fuerte
El éxito de Marruecos no solo está en su capacidad de producción, sino también en la estrategia gubernamental que atrae inversiones y mejora infraestructuras. Aunque Stellantis podría asignar nuevos proyectos a Villaverde, la competitividad de las plantas marroquíes sigue ganando protagonismo en el panorama automovilístico europeo.