El narcotraficante gallego, Francisco Millet Vilas, intentó nuevamente introducir drogas en la ría del Nalón, tras fracasos previos en Caminha (Portugal) en septiembre de 2023 y en Huelva en febrero de 2024. La Guardia Civil lo interceptó el miércoles junto a un remolque en el puerto de San Esteban, desde donde se presume que lanzó una narcolancha zodiac en alta mar, frente a la costa de Cudillero, donde tres franceses de origen magrebí se dirigieron a un barco nodriza para recoger un cargamento de cocaína.
Durante el regreso, la embarcación presentó fallos mecánicos, obligando a los magrebíes a solicitar ayuda de emergencia y a arrojar la droga al mar. Los tres sufrieron hipotermia tras momentos de gran tensión. Horas más tarde, las autoridades encontraron flotando 18 bolsas de deporte que contenían 25 paquetes de aproximadamente un kilo cada uno, sumando un total de 486 kilos de cocaína, la mayor cantidad incautada en Asturias en años recientes. El plan original era recoger la droga y regresar al remolcador, pero fue abortado debido a los problemas técnicos.
Los cuatro detenidos fueron presentados ante el juez sustituto de Pravia este pasado sábado 8 de febrero de 2025: Francisco Millet Vilas, de 40 años y oriundo de Ribeira, y los magrebíes Youssef Diamane, Aarab Abdel-Halimes y Jacim Belhacel, dos de ellos de aproximadamente 35 años y origen marroquí, y el tercero de 30 años y origen argelino. Los tres últimos residen en un suburbio de París; los de origen marroquí tienen familia, mientras que el argelino está soltero.
Ninguno de los cuatro ofreció declaración ante el juez, siguiendo el consejo de sus abogados de oficio, resultando en una breve comparecencia de unos 15 minutos. La Fiscalía solicitó prisión para todos debido a la magnitud del cargamento de droga, y el juez decretó prisión comunicada y sin fianza para los cuatro. Un quinto implicado, detenido el viernes en Ribeira, fue liberado sin cargos por la jueza del Juzgado número 2 de dicha localidad, al no estar relacionado con el alijo de San Esteban.
Mientras era trasladado a la prisión de Asturias, Millet Vilas saludó a un amigo de As Pontes con un «puxa Asturies», presente por deseo de la madre del detenido, quien esperaba rezando en Ribeira. Su amigo lo describió como una «buena persona» cuyos problemas derivan de su bondad. Millet, de aproximadamente 1,70 metros y 150 kilos, se mostró sonriente tras su comparecencia. Su historial delictivo se remonta a 2014, cuando fue detenido en Ponferrada por su participación en una banda que distribuía drogas en Castilla y León.

Conocido por su afición a relojes caros y coches de lujo, Millet luce varios tatuajes en su cuerpo. Se cree que forma parte de una red especializada en proporcionar lanchas rápidas y pilotos para el transporte de drogas. Esta red sufrió un duro golpe en octubre de 2024 durante la «operación Rebote-Ceira-Lobo», realizada por la Guardia Civil, la Policía Nacional y el Servicio de Vigilancia Aduanera, en la que también fue detenido Millet junto a otras 27 personas. En esa operación se incautaron cuatro narcolanchas, 23 kilos de heroína, marihuana, varios motores fueraborda y 150.000 euros en efectivo.
Los cuatro detenidos en San Esteban enfrentan largas condenas de prisión. Los franceses de origen magrebí tendrán tiempo para aprender español, según comentó su traductora a la salida del Juzgado de Pravia. El sábado fueron trasladados a la prisión de Asturias, donde quedaron en el módulo de ingresos a la espera de su clasificación.
La Policía Nacional de Gijón ya tenía una investigación en curso sobre las mismas personas, estableciendo una conexión con un quinto individuo detenido en La Coruña. Este último, un mecánico, había visitado Gijón recientemente por motivos ajenos al alijo de San Esteban, lo que llevó a su liberación el sábado por la mañana.
El viernes se realizaron registros en Ribeira, con la presencia de Millet Vilas y otro gallego detenido, utilizando perros entrenados para detectar drogas, aunque no se encontró ninguna cantidad significativa de estupefacientes. Ese mismo día, se inspeccionó en El Musel la embarcación utilizada para el alijo.