Hordas de inmigrantes ilegales provocaron en la tarde del domingo la huida de las autoridades francesas de una zona del barrio Francs-Moisins en Saint-Denis. La intensidad de los ataques, que incluyeron el lanzamiento de objetos, forzó a dos patrullas de la policía municipal a abandonar el área.

Las imágenes fueron grabadas desde un edificio cercano y difundidas ampliamente en redes sociales, muestran a los agentes siendo recibidos con una lluvia de objetos arrojados por los atacantes. En el video, se escucha a los jóvenes lanzar un mensaje desafiante: «Aquí mandamos nosotros. No vais a entrar». Este suceso ha sido calificado por muchos como una señal preocupante de la pérdida de control en ciertos territorios. Diversas cuentas, incluyendo las de miembros del partido Agrupación Nacional, han compartido estas escenas y denunciado públicamente el aumento de la violencia.

El barrio de Francs-Moisins, ubicado al sur de Saint-Denis, está delimitado por la autopista A1, el canal de Saint-Denis y la rue du Maréchal-Lyautey, entre otras vías principales. La zona norte, conocida como Bel-Air, está compuesta por edificios más antiguos, mientras que el sector sur alberga grandes bloques de viviendas sociales. Este complejo residencial cuenta con casi 1.800 pisos subvencionados, gestionados por el organismo público OPHLM de Saint-Denis y la empresa Logirep.

Junto a otras áreas vecinas como Cristino Garcia, Cosmonautes y Landy, Francs-Moisins forma parte de un plan de regeneración urbana que también incluye a Aubervilliers y La Courneuve. Debido a la alta concentración de problemas sociales, las autoridades han clasificado esta zona como una "No Go Zone".