La Policía Nacional ha llevado a cabo la expulsión de 20 inmigrantes multirreincidentes, algunos con antecedentes por delitos graves, que operaban en diferentes puntos del territorio español, principalmente en Cataluña. Según informó el cuerpo policial, la Unidad Central de Repatriaciones (UCR) gestionó el procedimiento en colaboración con la Brigada de Extranjería de Barcelona.
El operativo implicó el traslado de los detenidos desde el complejo policial de la Zona Franca de Barcelona hasta el aeropuerto de Madrid en una comitiva escoltada por 18 agentes y 16 vehículos. La expulsión se realizó mediante un vuelo especial, organizado con escolta policial, que fue programado para garantizar la salida efectiva de estas personas del país.
La preparación de las expulsiones requirió una intensa coordinación entre diferentes unidades policiales y la realización de trámites contrarreloj. Estos incluyeron autorizaciones judiciales y gestiones en los consulados correspondientes, todo con el objetivo de cumplir con la fecha inamovible fijada para el despegue del vuelo.
En la operación participaron diversos departamentos de la Policía Nacional, como la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Barcelona, el puesto fronterizo del Aeropuerto de Barcelona, la comisaría de Cornellà de Llobregat y el puesto fronterizo de Camprodon (Gerona). Además, agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) desempeñaron un papel clave para garantizar el éxito del operativo.
Los detenidos fueron trasladados en una comitiva escoltada desde el complejo policial de la Zona Franca de Barcelona hasta el Aeropuerto de Madrid-Barajas, donde quedaron bajo la custodia de la Unidad Central de Repatriaciones (UCR).